MEL: a principios de la década de los setenta fueron descubiertas las incursiones de una población de orcas en las aguas de Punta Norte. Los guardafaunas las observaban varase a sí mismas para capturar sobre la costa crías de lobos y elefantes marinos y, poco a poco empezaron a reconocer, por la forma de sus aletas dorsales y el diseño de sus monturas, a algunas de ellas que volvían a la zona cada año. Entre ellas destacaban dos. Bernardo y Melanie que comenzaron a formar parte de la pequeña población permanente de la Península Valdés y, todos creían que se trataba de un macho y una hembra. Siempre estaban juntos. Mientras Bernardo permanecía relativamente lejos de la costa, Melanie atacaban a las crías de los lobos marinos que cruzaban el canal. En 1976 la aleta dorsal de Melanie empezó a crecer más de lo normal para una hembra de la especie. Para sorpresa de muchos comenzó a evidenciar su madurez sexual. Melanie era un macho joven que mantenía un vínculo estrecho con...